La Culebrilla
La culebrilla, una
infección dérmica. Esta enfermedad provoca una
erupción en la piel siguiendo una línea. Se cree que cuando la línea
(culebra) une sus dos puntas (la cabeza se junta con la cola) tiene
consecuencias fatales para el portador.
Una forma de curarla es frotando un sapo sobre la
culebrilla para que este absorba el veneno. También se suele escribir
con tinta en ambos extremos las palabras Jesús, María y José. o simplemente se traza una línea con tinta
china rodeando la afección, cuidando de encerrarla y así evitar que se
unan las puntas. Se trazar la defensa con una pluma de ave, con una aguja o con un simple palito. Otros sugieren que para realizar la cura se
debe tomar un jarro con un poco de agua y asiendo tres ramitas recitar
la siguiente oración tres veces por día durante tres días: "Yo iba por
un caminito, me encontré con San Pablo, me preguntó que tenía, contesté
que era culebrilla, ¿con qué se curaría? Respondió San Pablo: con agua
de la fuente y rama de... (nombre del enfermo)".
La medicina científica afirma que el HERPES ZOSTER es una
infección aguda usualmente autolimitada topográficamente, que se produce
por activación del virus
latente del que la mayoría somos portadores VARICELLA-ZOSTER o Virus
del herpes humano 3, del que se puede tener inmunidad parcial luego de
haberse enfermado con la secreción de las pústulas de los pollos
"chickenpox". Esta afección ataca a los ganglios de las raíces
posteriores de los nervios espinales (sensitivos) y su área de
inervación, produciendo dolor neurálgico a lo largo del nervio afectado y
la erupción cutánea del área correspondiente a dicho nervio.
Es habitual que los curanderos aconsejen a sus pacientes asistir durante tres jornadas a las
sesiones de curación para que el remedio sea eficaz. Éstos suelen
recitar oraciones mentalmente para fortalecer sus poderes, solicitando
la asistencia de sus referentes religiosos. Está muy arraigada en los
ambientes folk la creencia de que el doctor no tiene conocimientos para
combatir la enfermedad. Por esta sencilla razón siempre que alguien
contrae el mal se solicita el concurso de un curandero. Sucede lo mismo
con el empacho y el ojeo, que según una tradición urbana y rural de
estos tiempos, los mismos doctores aconsejan llevar al enfermo ante la
presencia del “médico”.
Comparando la explicación que se dan nuestros paisanos respecto a
los orígenes de la mayoría de las enfermedades, con las de los
europeos, no he escuchado que asignen la presencia de estos males a la
acción de espíritus malignos, o brujas. En la Europa antigua
(especialmente la Edad Media) se justificaban las enfermedades
achacándoles la causal a la acción de brujas o espíritus traviesos,
sobre todo en los tiempos de mayor rigidez religiosa operada por el
cristianismo.
Nuestra gente campesina o montañés, ha desarrollado un
conocimiento (folclórico) extenso sobre las propiedades curativas de las
plantas, y una batería de prácticas rituales para combatir las
enfermedades, como la culebrilla, cuya verdadera causa desconocen.
(Texto de José Ramón Farias)
Nombre científico:Herpes Zoster
Síntomas de la culebrilla:
El primer signo de culebrilla es quemazón, dolor punzante,
hormigueo o adormecimiento en o debajo de la piel de un lado del cuerpo o
de la cara.
Algunas personas experimentan una picazón severa o molestias más que un verdadero dolor.
Muchas personas también se sienten cansadas y enfermas con fiebre, escalofríos, dolor de cabeza y malestar estomacal.
Luego de varios días con estos síntomas, aparece una erupción en
forma de franja como un cinturón que se extiende desde la línea media
del cuerpo hacia afuera. La erupción aparece como un pequeño grupo de
ampollas en forma de uvas, llenas de un líquido claro sobre una piel
enrojecida. Dentro de los tres días posteriores a la erupción, las
ampollas se tornan amarillas, se secan y se forman costras. Algunas
veces, las erupciones de la culebrilla pueden demorar más tiempo en
secarse en la personas VIH positivas con un sistema inmunológico
severamente debilitado.